
ALEJANDRA MIZRAHI
CLAUDIA AYBAR
QR-Randa
2017
Tejido y bordado
Tucumán, Argentina
91 x 91 cm
Se puede escanear el QR para ver el video, sobre como se hizo esta obra, o seguir el enlace:
Conocí a Claudia Aybar en el año 2012. Yo regresaba de vivir en Barcelona durante seis años y Silvina Fenik, desde el Centro Cultural Virla de la Universidad Nacional de Tucumán, me convocó para que hiciéramos un libro de la randa. Yo apenas conocía la técnica. La había sentido nombrar y había visto algunos pañuelos en las tiendas cercanas a la Casa Histórica. El Virla y el IDEP (Instituto de Desarrollo Productivo de la Provincia) estaban trabajando hace unos años con las randeras y su patrimonio. Este fue el motivo que me acercó a Claudia: conocer la técnica, la historia y ver cómo podíamos difundir ese maravilloso encaje que se realiza en el sur de la provincia de Tucumán.
Claudia es de El Cercado, comuna rural ubicada en Monteros, donde se concentran la gran may oría de las randeras (término con el que se describe a las mujeres que realizan esta artesanía textil). Esta actividad se desarrolla desde la época colonial y se ubica geográficamente donde se fundó lbatín (la primera capital de Tucumán) en el año 1565. Las damas castellanas que allí se afincaron traían entre sus habilidades las labores de estos encajes a la aguja que transmitieron de forma oral a sus descendientes. Actualmente, se registran alrededor de cuarenta randeras que se dedican a la confección de esta artesanía, entre las que está Claudia. La randa es un textil que forma parte de los denominados encajes, y su modo de construcción es a través de nudos, generando mallas y mallones.
La randa ha pasado de ser una denominación genérica en materia de encajes desde el siglo XV en Europa, hasta considerarse una técnica con sus peculiaridades en la actualidad. El tipo de encaje que se realiza hoy en la localidad de Monteros presenta especificidades a la hora de la elaboración de la malla y en la denominación de los puntos de bordado que se emplean. Las randeras ponen todas sus herramientas creativas a la hora de realizar los bordados, acuñando a los puntos nombres que responden a su naturaleza circundante.
Claudia realizó la randa QR poniendo en juego toda su expertise sobre la técnica, provocando cromáticamente a la tradición agregando el negro en una randa blanca nívea, como desafiando los dibujos que caracterizan la randa, de la simetría a la asimetría, de los motivos orgánicos a la geometría.
Alejandra Mizrahi – Junio 2017